Para el año 1900 y en virtud o por obligación del Real Decreto de 17 de septiembre de 1900 que establecía la obligatoriedad de matriculación de aquellos extraños artefactos que con cuatro ruedas y un motor de explosión había en España tres automóviles matriculados.
En un primer momento los automóviles, lo que nosotros llamamos coches, presentaban motores variados. Desde el vapor, a la explosión, pasando por los acumuladores eléctricos. Antes de 1907, casi todos son presentaban su motor de explosión. Llamativo, sobre todo, en contraste con la realidad actual, es la existencia de una marca española de automóviles: la Hispano-Suiza.
Un Hispano-Suiza
En ese RD se establecía el primer “Reglamento para el Servicio de Coches Automóviles por las Carreteras del Estado” siendo ésta la primera norma general dictada para regular el fenómeno del tráfico. Como dato curioso, el Reglamento limitaba la velocidad de circulación a 28 Km/h en carretera y 15 km/h en ciudad y obligaba a matricular los vehículos.
El primer vehículo matriculado en España data de octubre de 1900, un Clement con matrícula PM-1. El 11 de octubre de 1909 España se adhirió al convenio internacional para la circulación de vehículos de motor, el cual consagraba la universalidad de este medio de transporte.
Hacia 1913 se inicia en nuestro país el transporte de mercancías por carretera y tras la primera Guerra Mundial se difunden y aceptan las grandes ventajas del nuevo medio de transporte. Ahora bien, estos vehículos tenían que circular por unas carreteras concebidas para velocidades de 10 kilómetros y carentes de un trazado definido, o razonable. Los nuevos usuarios podían circular hasta diez veces más deprisa.
Tras diversos Reglamentos de circulación se logra redactar un Código de la Circulación , aprobado por Decreto de la Presidencia del Gobierno de 26 de septiembre de 1934. En este Código se suprimía la limitación de velocidad para todos los vehículos salvo para los de transporte de mercancías que era de 40 km y el peso se limitaba a 10 toneladas con excepciones.
El aumento de los servicios de transporte por carretera fue constante, lo que obligó a reglamentarlo por Real Decreto de 4 de julio de 1924, en el que se introdujo el sistema de concesión para las líneas regulares de viajeros y de autorización previa para los discrecionales de viajeros y mercancías.
Abordar la reforma de toda la red de carreteras en los años veinte era tan imprescindible como impensable. Por eso, se redujeron las pretensiones de mejora a un puñado de vías principales. Un Real Decreto Ley de 1926 establece la creación de un Circuito Nacional de Firmes Especiales que agrupa a las carreteras que supongan itinerarios principales, es decir, las que sean el enlace de las poblaciones de mayor importancia y los circuitos de valor artístico e histórico. El Real Decreto, además, obliga a las diputaciones y ayuntamientos a colaborar en dicho mantenimiento. Entre otras, las medidas que propone son: la utilización de nuevos firmes, la supresión de los pasos a nivel y la mejora de travesías, curvas y rasantes.
El Circuito Nacional de Firmes Especiales fue el proyecto que permitió cambiar radicalmente el estado de nuestras carreteras. Desde ese momento las mejoras eran visibles. Por un lado, con este proyecto de firmes especiales se habían eliminado las curvas peligrosas, y por otro, se habían peraltado sus bordes exteriores para contrarrestar la fuerza centrífuga. La velocidad que se podía alcanzar con un turismo era ya de 65 km por hora.
Mapa de Circuito Nacional de Firmes Especiales elaborado bajo el mandato de Primo de Rivera
Un área de descanso construida en 1930, junto al viejo tramo de la N-III
Terminada la Guerra Civil se aprueba un nuevo Plan de Carreteras por Leyes de 11 de abril de 1939 y 18 de abril de 1941, fruto de las cuales fueron la Instrucción a la que nos hemos referido anteriormente así como una nueva clasificación en Nacionales, Comarcales y Locales y un sistema de numeración para su designación. A este se añadió un Plan adicional de Caminos locales del Estado aprobado por Ley de 18 de diciembre de 1946. Pero la tarea principal fue la reparación de firmes y reconstrucción de puentes destruidos durante el conflicto bélico.
Por Ley de 21 de diciembre de 1961 se aprueba un Plan General de Carreteras referido al periodo de 1 de enero de 1962 al 31 de diciembre de 1977 y un plan cuadrienal 1962-1965.
Estos planes fueron superados por los acontecimientos y su logro más importante fue el Programa REDIA (Red de Itinerarios Asfálticos), que afectó a unos 5.000 Km y cuya idea era rematar el Plan de Modernización en el sentido de completar algunas obras y, sobre todo, de dotar a las carreteras de una anchura de afirmado y de plataforma uniformes. Se adoptó el afirmado de siete metros de anchura y la plataforma de doce metros en el caso general, reduciéndolos a nueve si las condiciones topográficas eran difíciles.
En 11 de diciembre de 1985 el Gobierno aprueba un nuevo Plan de Carreteras que es ratificado por el Congreso de los Diputados en 20 de marzo de 1986. Bajo este Plan, que se dio por terminado en 1993, se construyeron 3.436 Km de Autovías-carreteras de calzadas separadas, al principio similares, salvo algún detalle, a las autopistas y actualmente, prácticamente iguales-, 6.345 Km de acondicionamiento de carreteras, 874 Km de carreteras en zonas urbanas, 460 variantes de poblaciones y se acondicionaron más de cien travesías. En 4 de enero de 1994 el Gobierno aprobó el Plan Director de Infraestructuras (PDI), que fue refrendado por el Congreso de los Diputados en 21 de diciembre de 1995 y que abarca desde 1993 hasta el año 2007.
La entrada de España en la Unión Europea supuso un empuje definitivo a la red viaria española. Como vimos en la entrada anterior son más de 600.000 kilómetros los que recorren nuestro país, levantados en gran media por la financiación de fondos europeos.
Es más, en los años expansivos de nuestra economía (1997- 2007) se levantaron toda una serie de infraestructuras viarias que posiblemente estaban por encima de la necesidad real. Pero, a veces, la falta de previsión, otras, la falta de criterio, y en muchos casos, los intereses políticos han sobredimensionado la red de carreteras española. Pero claro es ahora cuando nos hemos dado cuenta de ello, cuando la fiesta terminó.
Y a esto se le suma el parque automovilístico. Siempre se ha dicho que el parque automovilístico de un país es un claro reflejo de su nivel de desarrollo. Pues bien, España presentaba en 2007 un parque de coches mayor que el de Francia al superar por uno el número de automóviles particulares y situarse en 501 vehículos por cada mil habitantes. El problema es que España tiene casi 20 millones de habitantes menos. ¡Qué lejos queda ese parque automovilístico formado por tres coches!
Cristina Estévez Domingo.
ResponderEliminarEn este artículo queda reflejado todos las medidas tomadas vinculadas con el automóvil y ahora resulta sorprendente, al existir por familia, al menos, un coche, que hubo tan pocos coches y no sólo eso, sino los pocos CV con los que contaban.
El artículo nos informa sobre el desarrollo de los autómoviles y a la vez el de las carreteras. La cantidad de vehiculos existentes( hay familias donde tres de sus miembros tienen coche)
ResponderEliminarprovoca grandes problemas en las ciudades tal como vimos en los temas anteriores. Los autómoviles cada vez se fabrican con más mejoras y con posibilidad de poder ir a más velocidad de la que está permitida por el código de circulación,lo que me parece un error ya que la mayoria de los accidentes son por exceso de velocidad.
En esta entrada nos comenta los principios del automóvil y como y cuando ha ido evolucionando , con sus respectivas medidas de circulación, modernización de los vehículos. También nos da cifras exactas de la cantidad de vehículos que tenemos, un numero mayor a los de Francia , contando con que aquí somos menos población.
ResponderEliminarHola, soy MªÁngeles Muñoz.
ResponderEliminarEn este artículo, podemos ver la evolución del automóvil detalladamente. Los vehículos han ido evolucionando conforme a unas necesidades marcadas por la población. Por ello, ahora podemos encontrar vehículos eléctricos,fabricados con la intención de contaminar menos.
También podemos observar diferentes cifras, de la cantidad de vehículos que hay.